La puerta se empieza a abrir lentamente,al otro lado puedo ver el pelo de Silvia.
Silvia sonríe pero en cuanto me ve cambia la cara,se acerca a mí y me abraza a lo cual yo me echo a llorar en sus brazos.
-No llores princesa,entremos y me cuentas.-dice separándose de mi.
Pasamos al interior de su piso y ella me lleva hacía el salón,es más o menos como el nuestro de tamaño,pero lo tiene aún más bonito,muebles de madera un sofá grande de color teja...
Ella se sienta en el sofá y hace un amago con la mano para que me siente.
Me acerco al sofá y me siento,ella me abraza de nuevo y yo no paro de llorar.
Dos minutos más tarde las lágrimas se acaban,mis ojos ya no tienen agua para demostrar la tristeza que tengo.
-¿ya me lo vas a contar?-pregunta Silvia preocupada.
-Vale te lo contaré....-comienzo a contarlo.
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-Pero,¿te has enfadado con Dylan?
Asiento con la cabeza,e intento llorar pero las lágrimas terminaron hace minutos.
-Pues ve a hablar con él,solo lo dijo porque te quiere,él te defiende.
-No,él sabe que no soporto que se peleen.Vale,Blas es un imbécil pero si paran no habría pasado nada de esto.Somos compañeros de piso debemos llevarnos bien.
-Si quieres puedes quedarte hoy aquí a dormir,o durante todo el tiempo que quieras aquí hay una habitación solitaria.
-¿de verdad?
-Claro,por una amiga lo que sea.
-¿ya me consideras amiga?-hago esfuerzo de sonreír.
-Pues claro,eres muy simpática y no has dudado nada en contármelo.
-Nunca había tenido tanta confianza con una persona a la que he conocido horas antes.
-Ni yo,eres la primera amiga en la que puedo confiar mucho.
Ahora sí que saco una gran sonrisa de oreja a oreja.
-Por fin veo esa sonrisa tan bonita que tienes.-me besa en la mejilla.
-Muchas gracias.-se lo devuelvo.
-No hay que darlas.-sonríe.-para eso estoy aquí.Tú cuenta conmigo siempre.
La abrazo.
-Vuelvo a mi casa,cojo el pijama y las cosas,y vuelvo ahora.
-Vale.
Nos levantamos de aquel sofá y vamos hacía la puerta,salgo y Silvia la cierra tras de sí.
Cojo mis llaves y abro la puerta.
Nada más entrar veo a Blas delante mío.
-Hola preciosa,¿dónde estabas?-sonríe.
-A ti no te importa,quita del medio.
-No hasta que me lo digas.
-Estaba con Silvia,la vecina de en frente.
-¿es tu amiga?
-Sí,¿algún problema?
-No,no.-dice quitándose del medio.
Voy hacía mi habitación cojo mi pijama,ropa para mañana y el neceser.
-Adiós.-me despido desde la puerta.
-Adiós.-dice Dylan secamente y triste.
Cierro la puerta y pico la puerta de Silvia.
Ella abre y pasamos.
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